viernes, marzo 31, 2006
Juez da la mano a Genaro
Si antes acudió a juzgados del Cono Norte y del Callao para obtener rmiguiel angel esoluciones judiciales a su favor, que le permitiesen ingresar a Panamericana Televisión y después que no se le retire la administración de la televisora, el broadcaster Genaro Delgado Parker ahora encontró apoyo en un magistrado de un juzgado de Cieneguilla, en las afueras de Lima.
Fue el Juzgado Mixto de La Molina-Cieneguilla, a cargo del ahora conocido magistrado César Armando Pecho Peche, que admitió una medida cautelar innovativa fuera de proceso presentada por el administrador judicial de Canal 5.
A favor de Genaro Delgado Parker, el juez dispuso la suspensión provisional de los efectos jurídicos y legales del contrato de transferencia de acciones y cesión de deuda -del 2 de octubre del 2002- y su adenda del 7 de enero de 2003, celebrados entre el Grupo Pantel S.A., Telespectra S.A.C. y el Grupo Industrial Ruferny S.A., operación por la cual Ernesto Schütz Landázuri -ex agente de la dictadura fujimontesinista- transfirió sus acciones.
Según el juez, la suscripción del citado contrato “tuvo como fin perturbar la ejecución de la medida cautelar dictada por el Juzgado Mixto de Carabayllo (Cono Norte) sobre la administración judicial” de Canal 5.
Según Pecho Peche, “existe la seria y grave posibilidad que Telespectra S.A. en cualquier momento y tomando como base el contrato del que se hace referencia, transfiera a terceras personas las acciones emitidas por Panamericana Televisión S.A., pese a la presunta nulidad de dicho acto por causa o fin ilícito”.
(OJO 15/03/06)
Fue el Juzgado Mixto de La Molina-Cieneguilla, a cargo del ahora conocido magistrado César Armando Pecho Peche, que admitió una medida cautelar innovativa fuera de proceso presentada por el administrador judicial de Canal 5.
A favor de Genaro Delgado Parker, el juez dispuso la suspensión provisional de los efectos jurídicos y legales del contrato de transferencia de acciones y cesión de deuda -del 2 de octubre del 2002- y su adenda del 7 de enero de 2003, celebrados entre el Grupo Pantel S.A., Telespectra S.A.C. y el Grupo Industrial Ruferny S.A., operación por la cual Ernesto Schütz Landázuri -ex agente de la dictadura fujimontesinista- transfirió sus acciones.
Según el juez, la suscripción del citado contrato “tuvo como fin perturbar la ejecución de la medida cautelar dictada por el Juzgado Mixto de Carabayllo (Cono Norte) sobre la administración judicial” de Canal 5.
Según Pecho Peche, “existe la seria y grave posibilidad que Telespectra S.A. en cualquier momento y tomando como base el contrato del que se hace referencia, transfiera a terceras personas las acciones emitidas por Panamericana Televisión S.A., pese a la presunta nulidad de dicho acto por causa o fin ilícito”.
(OJO 15/03/06)
# posted by NoLoToledo @ 9:08 a. m. 
Comments:
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Esta es una historia de navidad. El presidente Toledo estaba cantando villancicos con “Galleta”, cuándo vio la nariz colorada del reno Rodolfo y se acordó que tenía que hacer un regalo. Así es que ordenó que su gobierno le llenara la media a Genaro Delgado Parker.
El Canal 5 le debe al Estado peruano más de 15 millones de dólares, una cuantiosa deuda que se originó en 1981. Ese año, GDP se prestó esa cantidad de dinero del Eximbank de los Estados Unidos y del Banque de Paris para repotenciar su canal, que había sido expropiado por Velasco durante la dictadura militar.
En el 81, el Estado aceptó ser garante. Avaló el préstamo porque había sido el Estado, en manos de un militar dictador, quien lo había perjudicado. Hasta ahí todo correcto. El problema, sin embargo, comenzó cuando se vencieron los plazos, Genaro no pagó, y el Estado (como aval) tuvo que asumir el compromiso y pagar la deuda.
Delgado Parker pasó entonces de deberles a los bancos frances y norteamericano, a deberle al pobre Estado peruano.
Todo eso cambió el pasado 28 de diciembre del 2005, el día de los inocentes, cuando el gobierno publicó un decreto supremo firmado por el propio presidente Alejandro Toledo, ordenando la reprogramación del pago de la millonaria deuda de Panamericana Televisión.
Toledo le ha hecho el favor a Genaro de patearle, a sí como a Lora, una deuda de 15 millones de dólares. Por supuesto con unas condiciones, que de acuerdo a los especialistas consultados, son más que generosas.
Lo primero que ha obtenido Delgado Parker ha sido un año de gracia. Es decir, mientras termina este gobierno y se acomoda con el otro, el broadcaster no va a pagar nada. El decreto también le otorga 6 años para pagar una parte de la deuda en dólares, más o menos la tercera parte, 5 millones dólares, mientras que la deuda en euros, que es de más de 10 millones, podrá pagarla hasta finales del 2015, es decir de aquí a 10 años.
¿Qué otro empresario puede tener estos privilegios? Si usted que es un ciudadano que no delinque tiene un problema, le va mal en sus negocios y no paga una deuda, el banco le quita su casa, le remata su taller, sus máquinas.
Según Infocorp, las empresas de Genaro Delgado Parker no son fiables: Panamericana Televisión está calificada crediticiamente como sujeto de pérdida, es decir que no paga sus deudas. Y “Astros” tiene una calificación de “problema potencial”. ¿Cómo es posible que Toledo embarque al Estado, a todos, en una reprogramación que a todas luces nos perjudicará?
En esta carta enviada por Ernesto Schutz, hijo los otros socios, los mayoritarios, sostienen: “Nuestra empresa en su condición de legítima accionista mayoritaria no reconocerá ninguno de los actos ni contratos ilegalmente realizados por Genaro Delgado Parker...” es decir, si la administración volviese a manos de los hijos de Schutz, el Estado no tendría a quién reclamar. Esto es el colmo.
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El Canal 5 le debe al Estado peruano más de 15 millones de dólares, una cuantiosa deuda que se originó en 1981. Ese año, GDP se prestó esa cantidad de dinero del Eximbank de los Estados Unidos y del Banque de Paris para repotenciar su canal, que había sido expropiado por Velasco durante la dictadura militar.
En el 81, el Estado aceptó ser garante. Avaló el préstamo porque había sido el Estado, en manos de un militar dictador, quien lo había perjudicado. Hasta ahí todo correcto. El problema, sin embargo, comenzó cuando se vencieron los plazos, Genaro no pagó, y el Estado (como aval) tuvo que asumir el compromiso y pagar la deuda.
Delgado Parker pasó entonces de deberles a los bancos frances y norteamericano, a deberle al pobre Estado peruano.
Todo eso cambió el pasado 28 de diciembre del 2005, el día de los inocentes, cuando el gobierno publicó un decreto supremo firmado por el propio presidente Alejandro Toledo, ordenando la reprogramación del pago de la millonaria deuda de Panamericana Televisión.
Toledo le ha hecho el favor a Genaro de patearle, a sí como a Lora, una deuda de 15 millones de dólares. Por supuesto con unas condiciones, que de acuerdo a los especialistas consultados, son más que generosas.
Lo primero que ha obtenido Delgado Parker ha sido un año de gracia. Es decir, mientras termina este gobierno y se acomoda con el otro, el broadcaster no va a pagar nada. El decreto también le otorga 6 años para pagar una parte de la deuda en dólares, más o menos la tercera parte, 5 millones dólares, mientras que la deuda en euros, que es de más de 10 millones, podrá pagarla hasta finales del 2015, es decir de aquí a 10 años.
¿Qué otro empresario puede tener estos privilegios? Si usted que es un ciudadano que no delinque tiene un problema, le va mal en sus negocios y no paga una deuda, el banco le quita su casa, le remata su taller, sus máquinas.
Según Infocorp, las empresas de Genaro Delgado Parker no son fiables: Panamericana Televisión está calificada crediticiamente como sujeto de pérdida, es decir que no paga sus deudas. Y “Astros” tiene una calificación de “problema potencial”. ¿Cómo es posible que Toledo embarque al Estado, a todos, en una reprogramación que a todas luces nos perjudicará?
En esta carta enviada por Ernesto Schutz, hijo los otros socios, los mayoritarios, sostienen: “Nuestra empresa en su condición de legítima accionista mayoritaria no reconocerá ninguno de los actos ni contratos ilegalmente realizados por Genaro Delgado Parker...” es decir, si la administración volviese a manos de los hijos de Schutz, el Estado no tendría a quién reclamar. Esto es el colmo.
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